martes, 30 de julio de 2013

VIENTO DE LEVANTE

Dicen por aquí que el levante es un viento que tiene fama de diabólico y enloquecedor pero  a mí, como  todo lo transgresor, me eleva a una especie de estado de gracia al arremolinar en furioso torbellino mis ideas, purificarlas y devolvérmelas prístinas y nuevas, recombinadas en formas antes nunca entrevistas, y es que este viento de mi tierra no es otra cosa que un soplo enardecido de la ruah, un espíritu femenino con llamas encendidas.

Y por no hablar del placer que significaba de niña, en los días en que ya empezaba a apretar el calor, correr cara al viento y sentir cómo me levantaba esas horribles faldas ásperas del uniforme mientras imaginaba ser un travieso espíritu del aire que volaba entre sus alas.

Por eso hoy que ha vuelto a soplar y a traernos más calores, quiero dedicarle esta entrada del blog con el homenaje de este intento de soneto.


Ven, arrebata raudo mi sentido,
eres la fuerza que mi tierra enciende
en llamas de aire que su luz extiende,
ráfaga de vida, ardiente latido.

Envuélveme en tu soplo embravecido,
y que así penetre mi ser tu duende,
arrebóleme el halo que desprende
tu fugaz estela, agudo silbido.

 Tu divina locura creadora
se trueque en mí mies de fruto abundante,
gracia de tu energía  arrolladora,

que mi alma eleva en éxtasis amante
rendida ya ante tu aura inspiradora,
don de los dioses, viento de Levante.



7 comentarios:

  1. El Levante, la mejor manera de entimidar a los pescadores y a los nadadores. Es la ira de la mar, mediando los vientos revoltosos y descarriados.
    Me gusta el poema, y me gusta el Levante.

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    1. El sharki en la playa de Martil. Muchas gracias, Ahmed, y recuerdos por la querida Hamama Albaida. Mabruk Ramadan.

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  2. Inma, a mí también me transportan los vientos de Cádiz a los lejanos pero íntimos lugares donde la creatividad y yo jugamos a ser uno.
    Te dejo un fragmento de un poema que en su día le escribí, con algo de broma y sorna.

    Viento:
    Sopla desde donde quieras
    porque lo tuyo es soplar
    para ondear las banderas
    y hacer olas en el mar.

    Y quién no soporte el viento,
    no venga a Cádiz. Lo siento.

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    1. ¡Muy bueno, Aboro! La poesía también ríe y bromea, que no falte el humor. Y, sí, los vientos y Cádiz son uno, inseparables, quien no quiera volar, que no venga. Fíjate si será que cuando no sopla nada aquí se expresa diciendo el nombre del viento dominante con el complemento "en calma". No se concibe el clima sin vientos.
      Un abrazo.

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  3. Hermoso canto a Eolo. Feliz verano. Un abrazo.

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    1. Gracias, María José, siempre tan amable y atenta. Yo también te deseo un feliz verano. Besos.

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  4. Hola Imma,

    A mi tambien me gusta e inspira el viento, aunque no conozco el de Levante, has conseguido que lo sintamos con tu poema.

    Un fuerte abrazo,
    Bertha

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