A los alumnos y alumnas del C.E.I.P. El Trocadero de Puerto Real (Cádiz) y a Charo, tutora de 6º.
Os lo debía. Desde que estuve con vosotros en esa mañana inolvidable de primavera en vuestro cole, alla en la tierra donde pasé mi infancia, me dije que tenía que escribir esta entrada en mi blog, pero ya veis, a veces la vida adulta conlleva tal laberinto que se nos olvida hacer los deberes, tanto que me veía que terminaba el curso y yo misma en mi interior me iba a plantar un descomunal suspenso por no haber presentado a tiempo mi trabajo. Y como me suele suceder, aquí estoy escribiendo en esta calurosa noche sevillana en un insomne intermedio mientras mi mente divaga entre recuerdos de una jornada en la que la magia misteriosa de la poesía fluyó viva entre nosotros.
No era la primera vez que experimentaba el placer de compartir mis versos con jóvenes estudiantes de primaria, pero sí la más especial. Con vosotros me sentí profeta en mi tierra, pude recordar mucho de mí, de la niña que fui y del origen más arcano de mi poesía. Yo también, como vosotros, sé de mar y viento, de paseos por Las Canteras y baños en La Cachucha o el Río San Pedro, y aunque a buen seguro mi niñez fue muy distinta, sin embargo siempre hay ese aire de la tierra que pude reconocer en vuestras sonrisas y vuestros gestos, en la cadencia de vuestras palabras y en la chispa de vuestras respuestas. Estar entre las aulas de vuestro cole fue como reencontrarme un poco a mí misma.
Cuando nos planteamos hacer lo que llamamos talleres de poesía, a veces nos ponemos muy trascendentales y empezamos a plantearnos cuáles serían las actividades más idóneas, pensamos en cómo transmitiros lo que os queremos contar y qué poemas pueden ser los más apropiados para vosotros. Craso error. Es una equivocación pensar que vamos a daros algo. No. Si algo he aprendido en mi trato con alumnos y alumnas de primaria, y también con los más pequeños, es que sois vosotros quienes me enseñáis a mí. Y os explico.
Mirad, a veces los mayores lo complicamos todo. Queremos racionalizar y explicar algo que a la razón supera. Y nos empeñamos en deformaros con nuestros análisis y nuestras opiniones, pero vosotros, en este caso, no las necesitáis. Dicen que la poesía es el primero de los géneros de la literatura, y debe ser así, porque es el que a los pequeños más os llega, el que os inunda y os hace participar con todo el ser: la voz, el cuerpo, las palmas... No hace falta explicar nada, porque entra por todos los sentidos y cala, y a veces las explicaciones sólo sirven para estropear el momento.
Por todo esto nada fui a enseñaros, ni tampoco lo pretendía. Vosotros ya lo llevabais dentro, sólo era cuestión de sacarlo a la luz. Sin embargo, para mí, pobre aprendiz de poeta, el contacto con vosotros, vuestro entusiasmo, vuestra forma de ver y sentir el poema, fue, como siempre que tengo uno de estos encuentros, toda una lección de poesía, de la de verdad, de esa que siempre habrá a pesar incluso de los poetas.
Quiero dejaros aquí, para vosotros, aquel poema que recordaréis os recité en clase. Vaya con mi agradecimiento al colegio El Trocadero de Puerto Real, a todos los profesores del centro, en especial a Charo, gracias a la cual pude estar allí esa mañana, a los responsables de la radio por su cariñosa entrevista, pero sobre todo a vosotros, chicos y chicas por regalarme unas horas que nunca podré olvidar.
La
Luna salta a la comba
La
luna salta a la comba
con
la cola de un cometa
y
la persigue entre estrellas
un
lucero que la adora.
La
noche negra sería
si
no fuera por su brillo
y
el corazón encendido
del
lucero que la mira.
Mi
niño, no tengas miedo,
no
temas tú, niña mía,
que
si la luna no brilla
nos
alumbra su lucero.
(I. Calderón del poemario infantil Ronda de la rima rima)
Inma,
ResponderEliminarMe siento cercana a ti, pues yo también estuve bastantes años como maestra de primaria. Tienes razón ellos nos enseñan a difuminar los caminos oscuros y a hacer fácil lo imposible. La mañana debió ser enternecedora y muy didáctica para todos: mi enhorabuena.
La Luna, siempre ha sido arcano de poemas por ser la más hermosa de todo el firmamento que vemos y nos contempla. Hermosas palabras para que los niños se presten a escuchar y a crear sus propias composiciones. Un beso amiga,
Ann@ Genovés